Descripción
Dimensiones: altura 15cm diámetro taza 9cm.
Información y cuidados de la planta de café
Descripción general
La planta de café, conocida como Coffea arabica o Coffea canephora según la especie, es un arbusto tropical de hojas brillantes y crecimiento relativamente rápido. Se cultiva como planta ornamental de interior por su follaje atractivo y por la posibilidad de producir flores blancas aromáticas y frutos rojos en condiciones adecuadas.
Luz
Necesita luz indirecta brillante. Tolera luz media, pero su crecimiento será más lento. No debe exponerse al sol directo fuerte porque puede quemar las hojas.
Riego
Requiere riego regular manteniendo el sustrato ligeramente húmedo. Se debe regar cuando la parte superior del sustrato esté seca. No tolera el encharcamiento, que puede provocar pudrición de raíces. En invierno conviene reducir la frecuencia.
Humedad
Prefiere ambientes húmedos debido a su origen tropical. Agradece humidificador, bandeja con agua y piedras o convivir con otras plantas para aumentar la humedad ambiental.
Temperatura
Crece bien entre 18 y 26 grados. Evitar temperaturas inferiores a 12 grados y las corrientes frías.
Sustrato
Necesita un sustrato suelto, aireado y con buen drenaje. Son adecuados los sustratos para plantas tropicales o mezclas con turba, fibra de coco y perlita. También agradece un pH ligeramente ácido.
Fertilización
Debe fertilizarse en primavera y verano cada cuatro semanas con un abono equilibrado o ligeramente ácido. En otoño e invierno se reduce o suspende la fertilización.
Poda y mantenimiento
Conviene retirar hojas secas o dañadas y hacer podas ligeras para controlar el tamaño y favorecer la ramificación. Limpiar las hojas con un paño húmedo ayuda a mantener su brillo y salud.
Plagas y enfermedades
Puede verse afectada por cochinillas, pulgones y ácaros. El tratamiento con jabón potásico o aceite de neem suele ser eficaz si se repite cada semana hasta eliminar la plaga. El exceso de riego es la principal causa de enfermedades por hongos.
Trasplante
Se recomienda trasplantar cada uno o dos años en primavera, aumentando solo un tamaño de maceta para evitar un exceso de humedad retenida.




